De historias de brujas y lesbianas.

Cuando era pequeña vivía en la ciudad de Chihuahua en una colonia popular en una casa de Infonavit con una familia muy particular. Pertenezco a una tribu grande, compuesta por 10 hombres y cuatro mujeres. Así que mi niñez la pase acompañada de 9 autoridades sobre mi, a la vez que yo era autoridad para cuatro más.

En ese tiempo una pareja de tío y tía con hijos más o menos con las edades de nosotros, solía visitarnos frecuentemente. Así, crecimos con las historias de brujas que nos contaba la tía Lela —Pero esta es otra Lela, mi tía Aurelia no eres tú, para que no te confundas Lela. Mi tío se llama Lalo y su hijos José Luis, Meny, Elías, Ma. Elena y no me acuerdo de los otros nombres. Era una familia muy divertida, vivían en La Junta, Chihuahua, un pueblito cerca de Creel, en plena Sierra Tarahumara. Mi tía era una mujer grandiosa, morena, muy simpática y siempre nos contaba historias de brujas.

Una de estas historias se quedó en mi mente para siempre. Fue la primera vez que oí hablar de esos seres de fantasía que suelen asustar a muchos y que para mi siempre ha sido objeto de risa y evocación de recuerdos comiendo deliciosas donas, pan de dulce, coca-cola y café negro. Siempre nos decía "ve tráete los colchones y las sodas!!. —Aguanta, no vayas a la mesa a hartarte de pan, calma, esto es un cuento.

Bueno, para no hacer el cuento largo, esta tía me contaba que allá en Mata Ortiz, donde ella nació, solían verse cada día de Muertos a cierta hora en el crepúsculo unas bolas de fuego flotar por las calles en el pueblo que a esa hora parecía fantasmal. Nunca me han asustado las brujas, enfatizo, pero con ignorancia infantil y las puertas abiertas de la pubertad, la escuchaba con fascinación. Su tono de voz cambiaba, se hacía serio y esto le daba un toque de misterio.

"Dicen que esos arbustos secos que vemos volar por las calles lentamente, son brujas y en la noche, convertidas en esferas de fuego, dan vuelta y que recorren todo el pueblo en busca de almas, también cuentan que muchos niños se han desaparecido, porque esas brujas se los han llevado."

"¡¡Ay tía yo no creo en las brujas!!"

"¡¡Cállate que te van a llevar!!" dijo seria con las brillantes y morenas mejillas curtidas por el frío e iluminadas de abajo hacia arriba por el fuego fantasmal, acomodando su mañanita de lana negra tejida con flores magenta reflejadas desde el fondo en sus negros ojos que asomaban al infinito de la sincronía de los tiempos.

El silencio imperaba y todos nos quedábamos muy solemnes imaginando aquellos seres arquetípicos. Qué íbamos a saber de arquetipos unos niños. Mucho menos nos íbamos a asustar.

"No, pero es que son unas brujas  blancas con ojos rojos... tienes que asustarte." se escucharon dos voces al mismo tiempo.

Aseguraba mi tía en tono serio y misterioso. En el mismo instante alguien más lo hacía en la lejanía de un espacio y un tiempo perceptible pero intangible años antes... después, tal vez al mismo tiempo en dimensiones paraLelas filtradas a través de los círculos microscópicos de las paredes del mundo virtual.

Bueno pues tía para no decepcionarte, "si ¡ayyyyy!! qué susto" Dije con mi característico escepticismo.

Todos los niños nos reímos alrededor de la hoguera.

"¿Cual hoguera? ¿Niños? ¿Cuáles niños? ¿Los de María Sabina, esos que te morías por probar?"

"¿Quién dijo eso?"

—"Pues en donde estamos bailando, ¡¡¡muévete!!!"—

" ¡'Tas loca..! ¿...de quiablasn??? ¡¡¡No.. quítate, no aproveches para abrazarme!!
"ai  ai ¿Te asusta que te abrace?"
" No, hueles re feo!! zácate, que seas mi amiga no significa que tenga que acceder a tus peticiones, además aunque me gustaran las viejas, tu apestas."

"Creo que estás al borde de la locura, yo ni te quería abrazar, además es tan bello y tan puro abrazar a las amigas. Dame un beso, a lo mejor así se te quita lo loca y te das cuenta de que estás enamorada de mí. Mi amor por ti es puro y quiero lo mejor para ti. Nadie te querrá como yo... dame un beso..."
"No."
"Dame un beso..."
"No y lárgate de mi vista, psicótica."

"¡¡¡Dame un besooooooo!!! ¡¡¡Perra!!!"

.....comando/control/manzana "Z".... comando "Z" .....manzana "Z"... control "Z"..... undo, deshacer la acción.... undo... undooooo

"Esto no sucedió, eso está en tu mente, o ¿en la mía...? ¡¡¡Porfis , porfis, por favor dile a Dios que de comando/manzana/control (depende de la computadora/ordenador donde te encuentres) tecla Z, por favor!!! Presiona el pulgar y la tecla" Z..."

 ¡¡¡al mismo tiempo!!!

La cabeza me da vueltas, creo que de bruja me convertí en la novia del diablo, ¡ah! ése si me daba miedo, con su cola roja de flecha, la pata de cabra y una de gallo... como el de la lotería.

"Deja de jugar que es en serio o voy a invocar a la lluvia negra, si la delgadita con redondas gotas, para poder defenderme... toda esa gente que ahora me rodea y quienes me revalidan como inteleitual orgánica consciente."

Ya vete, aburres con lo mismo. Mejor ponte a escribir. Y Leer un poco no te vendría mal. Un buen escritor es primero un buen lector. Pero porfa ya no te cuelgues de personas e historias de quienes primero destruiste —en tu bizarro mundo interno, claro, con todo tu odio y luego para tu conveniencia "literaria" las convertiste en fuente de inspiración. Ahora hasta poemas y sonetos les compones... ¡cuánta incongruencia! Hipócrita desmedida, mezquina. Acuérdate del homenaje a  Susana, cuando colgaste en la página hecha en su honor, un texto donde la alabas —minutos antes habías hablado pestes de la difuntita—,  tu amigo gey, de quien vaciaste la correspondencia en tu última publication; la amiguita de él, de quien eres nuevamente "amiga", como los hiciste garras y ahora andas muy friend!! Irremediablemente te enamoras de tus objetos de odio y envidia. Eres tan predecible y despreciable a la vez. Y por tanto ya careces de interés para mi. Engreida.

Sei propio il colmo!